Ana María Gómez González nació el 5 de enero de 1902 en Madrid. Creció en el seno de una familia siendo la cuarta hermana de 14 y murió el 6 de febrero de 1995. Tuvo que trasladarse a Avilés, donde comenzó en el mundo del arte. En los años 20, los artistas estaban comprometidos y tenían derecho a opinar de la sociedad o de la política. Mallo fue aceptada en la real academia de Bellas Artes de San Fernando. Junto a otras artistas decidió batallar contra el clasicismo o el convencionalismo artístico. La intención de las tres artistas era, primero destruir los límites entre géneros y después eliminar las diferencias de mujeres entre clases sociales. Dalí y Mallo llegaron a ser grandes amigos. Ambos se interesaron por el mundo del subconsciente. Mantuvo una relación amorosa con Rafael Alberti, la cual fue muy comentada debido a que su trayectoria artística resultó ser bastante simultánea. Participó en la revista occidente, lo que resultó imprescindible para su desarrollo al conseguir muchos contactos. El tránsito del color de las verbenas y la alegría popular hacia las época oscuras completas de las cloacas y campanarios muestran el oscuro presagio, la inseguridad, el paso del día y la noche. La serie de cloacas y campanarios es enlazada con la España negra. Su exilio no se consideró una huida. Vivirá en argentina 25 y pintará sin parar de una forma más libre que nunca. Al volver, pasó por un silencio público hasta que se sintonizó con una nueva generación activista. Sin embargo, será considerada la musa de la movida madrileña. Envejecerá en Madrid y seguirá pintando hasta que se le acuse de plagio. Se tuvo que enfrentar en el arte a muchas barreras pero las superó sin dificultad. Batersby considera que hay dos tipos de mujeres, aquella que renuncia a su sexualidad para convertirse en hombre y la que sigue siendo mujer, de esta manera renunciará a poder ser un genio y lo recalca con la afirmación de Goncourt; “no hay mujeres geniales, las mujeres geniales son hombres”. El ser mujer sigue siendo un factor que incluye sean incapaces para pintar, Mallo fue muy criticada debido a que era una adelantada de su época. Maruja Mallo, en clave irónica, se considera de “espíritu creador masculino”, ridiculizando la supuesta inferioridad femenina. Como conclusión, destacar que es conocida como la transgresora y fue convocada para exponer junto a Picasso y a Gris.
Resumen realizado por SARA SEGURA PACHECO 6º de priamria CEIP Ferrández Cruz
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